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A veces comprendo porque me gusta mucho Alejandra Guzmán, además de las letras de sus canciones, me encanta su actitud, gritarle al mundo lo que piensa. El tener voz, el no reservarse, sí claro se habla de la asertividad como una virtud, pero a veces más es una tendencia a la cobardía, al miedo del futuro, pero ¿Y si no hay mañana?
Hoy quisiera gritarle al mundo, quisiera decirle a todos aunque a nadie le importara, hoy por eso escribo, aunque sé que no importa, así grito hoy, hoy digo que extraño, que odio, que amo, que siento y que no soy de palo, que los minutos acumulan carencias, que no soy de palo, que siento y que amo.
Hoy grito que tengo derecho, que quiero las responsabilidades, que no quiero solo la mitad, que no quiero el secreto, lo quiero todo y lo quiero completo, que no quiero mentiras, que quiero verdades, que merezco y que ofrezco, que si doy mil quiero lo mismo, exijo reciprocidad, no quiero solo la mitad.
Grito que estoy cansada de callar, de sonreír, de escuchar, de hacer, de ser... quiero silencio y mi voz, nada más, quiero privacidad en público, quiero paz y tormenta, quiero todo, pero no quiero nada menos, nada a la mitad.
Quiero gritar a toda voz, pero sin molestar a nadie, o molestar a todos, pero nada a medias. Ya no quiero nada a medias, o es todo o es nada. No más.
2 Comments:
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- Anónimo said...
3 de enero de 2011, 10:14Me gustó... hay k saber exigir lo que se quiere, aunque el mundo está en escala de grises y no absolutos para mí :)- Psicolibelula said...
16 de enero de 2011, 11:46mmmm a mi los grises no me parecen colores, son muy planos y tristes :( Espero que encuentres colores más definidos y alegres ;)
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